Las tres Cátedras universitarias del Grupo Térvalis y Fertinagro Biotech organizaron Renowagro, el primer foro internacional sobre las necesidades y retos del sector agroalimentario, que inauguró el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.
El I Encuentro Internacional Renowagro reunió en Zaragoza a todos los actores que intervienen en el proceso y pueden tener alguna incidencia sobre la mayor sostenibilidad del sector agroindustrial, la administración, las empresas, los productores y los centros de investigación. A través de las intervenciones y debates entre grandes expertos mundiales se abordaron cuestiones como los fertilizantes de origen orgánico, que deberían progresivamente sustituir a los fertilizantes minerales, la importancia de la gestión de purines y excrementos de la ganadería o de la necesidad de proteger los suelos.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, inauguró este encuentro y en su discurso apostó por la innovación para rentabilizar los purines y excrementos ganaderos como nutrientes ricos en nitrógeno para la agricultura, en el marco de la economía circular. Señaló Planas que la producción de alimentos «es una cuestión estratégica” y que Aragón es una comunidad que está en la vanguardia de Europa en este ámbito, y marca el camino a seguir en un momento crucial, en el que se ha incrementado un 149% el precio de los fertilizantes en los mercados mundiales, por lo que el ministro defendió que “que la fertilización orgánica sustituya recursos fósiles es una gran oportunidad para paliar esta situación”.
El director de Desarrollo Estratégico del grupo Térvalis, Sergio Atares indicó que Renowagro “ha sido un punto de encuentro para compartir visiones acerca de los retos del sistema agroalimentario y soluciones que ya están desarrolladas, así como también establecer compromisos, porque “la transición alimentaria necesita la colaboración de todos los actores del sector”.
En este sentido, Atares añadió que Grupo Térvalis cederá al Gobierno de Aragón el uso conjunto de las patentes propias del grupo para la revalorización de los purines con el objetivo de desmineralizar la producción agrícola.
Y es que el sector agroalimentario en Aragón representa el 10% del PIB y el 12% del empleo, por lo que el presidente del gobierno de Aragón, Javier Lambán, quien clausuró el foro, se mostró muy satisfecho del trabajo que viene desarrollando el Grupo Térvalis y Fertinagro Biotech asumiendo el desafío de la sostenibilidad del sector agroalimentario, al que aportan soluciones.
Lambán anunció que se va a impulsar un proyecto piloto pionero, que permitirá convertir los fertilizantes minerales en fertilizantes orgánicos a partir de purín y que se desarrollará en la comarca de las Cinco Villas. Con este proyecto N-Circular Aragón se pretende demostrar el beneficio económico que estos fertilizantes tienen para todos los agentes implicados. Se testarán las diferentes tecnologías para que los recursos biológicos y orgánicos presentes de forma natural en los purines, permitan aumentar la salud de los suelos de esta comarca aragonesa, para producir alimentos de manera más sostenible. En él colaborarán además de Fertinagro Biotech, la empresa Vall Companys, la Federación de Cooperativas Agroalimentarias de argón y Asociaciones Agropecuarias comarcales.
“Poner de manifiesto que hay un desafío por resolver y que se debe hacer de manera conjunta para desarrollar de forma sostenible el sector agroalimentario en Europa, que sea capaz de garantizar la seguridad alimentaria” es en definitiva la idea principal destacada por el organizador de Renowagro, Miguel Ángel Naranjo, que califica de éxito las casi 800 personas inscritas en estas jornadas en las que se escucharon soluciones factibles para la agricultura, a partir de la gestión de los recursos orgánicos.
Entre otros participaron Ángel Ruiz Mantecón, coordinador del Área de vida del CSIC; Ludwing Hermann, presidente de la Plataforma Europea del Fósforo Sostenible o Carlos García del CEBAS-CSIC. Este último insistió en que es necesario proteger y conservar el suelo el otro pilar en el que se sustenta la consecución de ese futuro sostenible para el sector, y añadió que los suelos en España deben recibir materia orgánica de calidad para incrementar su fertilidad.
Ana Robles Aguilar de la Universidad de Gent (Bélgica), Nicola Frison de la Universidad de Verona (Italia), Keiji Jindo, de la universidad de Wageningen (Holanda) o Laia Llenas subdirectora del Centro Tecnológico BETA de la Universidad de Vic, que coordina el proyecto europeo Fertimanure, entre otros, aportaron su conocimiento y soluciones para la recuperación de nutrientes, enmiendas orgánicas, y explicaron cómo se gestionan los residuos orgánicos en países en desarrollo.
Sustituir fertilizantes minerales por orgánicos una solución sostenible para el sector agroalimentario
El agricultor de Villarmentero de Esgueva (Valladolid, Antonio Torres, también estuvo en Zaragoza para asistir a este foro y está convencido de que la agricultura está cambiando y hay que aprovechar estos recursos que eran desconocidos. “Su gestión va a cambiar la agricultura y es por donde va la política europea. Se trata de cerrar el círculo, utilizar menos químicos y aprovechar estos productos como el estiércol y los microrganismos que van a ser habituales en la agricultura”, comentó.
Este agricultor vallisoletano piensa que tenemos una buena oportunidad, con la coyuntura actual y la entrada de la nueva PAC, para “aprovechar estos recursos que teníamos a mano, pero que no les hacíamos caso porque con los productos químicos no nos hacían falta y les teníamos olvidados”. Para Torres, ante este nuevo desafío, “el sector va a seguir avanzando e innovando porque no hay ninguno que lo haya hecho tanto en los últimos años, señaló.
En Zaragoza, también nos encontramos a el Director regional de la zona Duero de Fertinagro Agrovip, Juan José Ferrero, que nos comentó que la gestión de los restos orgánicos va a ser muy protagonista en la agricultura que viene. “Hoy en día la agricultura y la ganadería está enfocada a la reducción de emisiones de CO2 y dar a los subproductos una aplicación en base a la economía circular”. Para Ferrero, algo que parecía complicado a priori “ya lo está haciendo Fertinagro aportando soluciones y alternativas a la aplicación química y toda la investigación va centrada en los biofertilizantes y el biocontrol”, avanzó.
Durante los dos días de congreso, Empresa agraria se encontró a varios protagonistas de este sector como es el caso de Alfredo Tapias, gerente de la asesoría agrícola Tempus Fructuum, que nos comentó que con las limitaciones de los nitrogenados el futuro de la agricultura pasa por los recursos orgánicos. “Nosotros somos especialistas en viñedo y en este sector, casi toda la fertilización es de este tipo porque “cuanto más materia orgánica, mayor estructura del suelo”. Para Tapias, una de las ventajas de este tipo de fertilización es que los microelementos y los macroelementos están más tiempo disponibles para la planta y su “alimento” más presente a largo plazo. Además “es de fácil aplicación, más asequible y ahora cada vez hay mejores presentaciones para que el agricultor pueda utilizarlas y reducir el uso de los nitrogenados”, explicó.
Otro de los representantes de Fertinagro que nos encontramos por Zaragoza fue a Luis Felipe Forés, adjunto al Director Regional de Fertinagro en Castilla y León, que nos comentó que la gestión de materias orgánicas como fertilizantes es el único camino por dos razones. La primera, porque si no las gestionamos, no sabríamos que hacer con ellas y segundo porque tenemos que reducir la aplicación de los productos químicos minerales. “Si queremos seguir produciendo lo mismo, cuidando el medio ambiente y ser sostenibles vamos a tener que recurrir a ellos”, aseguró.
Forés comentó que en España hay muchas zonas en las que la materia orgánica está bien pero que en otras zonas no, “por lo que recurrir a los abonos orgánicos es la mejor manera de recuperar los suelos de estas zonas”. En este sentido no explicó que los inhibidores de nitrógeno, las micobacterias y otros avances que está desarrollando Fertinagro “van a ayudar a conseguir las mismas producciones con otros recursos y aplicando menos productos químicos que es lo que nos demanda Europa”.
El foro abordó soluciones que ya se están aplicando en la gestión de materias orgánicas como fertilizantes
Otro de los asistentes con el que tuvimos la oportunidad de charlar en Zaragoza fue con Ignacio Aedo. El Delegado Comercial de Cereales y Abonos Valladolid comentó que lo que se estaba tratando en este foro, Fertinagro lo lleva trabajando muchos años. “el suelo no es un espacio inerte como ha considerado el mundo agrario muchos años en el que restamos y súmanos unidades, es algo vivo y hay que aprovechar ciertos residuos para dotarlo de vida”, señaló.
Para Aedo, otros países están más avanzados en la gestión de materias orgánicas como fertilizantes, quizás por la necesidad, pero debemos “aprovecharlas porque es una necesidad que se va a convertir en obligación”. El suelo “es nuestro lugar de trabajo para agricultores, industria, consumidores y no hay que olvidarlo”, recalcó.
En la misma línea opina el gerente de CEAVALL, Gonzalo Sotillo, que también estuvo en Renowagro. “Tenemos que seguir avanzando en el desarrollo de la agricultura sostenible y bio economía circular, apoyándonos en productos orgánicos, bioestimulantes y menos contaminantes, pero más eficientes en el uso del nitrógeno y del fósforo, sin pérdidas de nutrientes, pero, sobre todo, basándonos en el marco actual socioeconómico que nos está tocando vivir y dentro de una actividad agrícola económicamente rentable”, comentó a nuestra revista.
Empresa Agraria también tuvo la oportunidad, en estos dos días de foro, de entrevistar a alguno de los ponentes como Gregorio Antolín, asesor técnico y cofundador del Centro tecnológico CARTIF.
Antolín en su ponencia explicó que, en la utilización de los residuos, su gestión y trasformación, no solo vale con que se aporte una solución y sea técnicamente viable, si no que la logística, es clave. “La logística tiene más peso que la tecnología y es un aspecto a tener en cuenta porque hay que desarrollarla muy bien. En la viabilidad económica la logística supone un porcentaje entre el 60% y el 80%”, aseguró.
El también profesor de la Escuela de Ingenieros Industriales apuntó que los residuos normalmente no tienen una sola aplicación sino que tienen muchos compuestos que si se extraen tienen un valor altísimo.
