“No vendemos plantas, vendemos soluciones e innovación”
¿Cómo surge AGROMILLORA?
AGROMILLORA nace en 1986 como un vivero familiar, y con el tiempo se ha convertido en un referente mundial en la producción y desarrollo de plantas leñosas in vitro, con presencia en los cinco continentes. Somos “los padres fundadores” en introducir el concepto del seto en cultivos como el olivar y el almendro, y hoy seguimos liderando la transformación del campo con soluciones adaptadas a los retos agronómicos y climáticos del siglo XXI.
Hoy en día las empresas basan su éxito en la innovación. ¿Qué representa para AGROMILLORA este concepto?
La innovación es el eje vertebrador de nuestra empresa, está en nuestro ADN. No se limita al desarrollo varietal, sino que se extiende al modelo productivo, a los formatos de planta, al control sanitario, a la mecanización y al acompañamiento técnico. Innovar es anticiparse a las necesidades del agricultor y ofrecerle una herramienta que le permita ser más rentable, sostenible y competitivo. La innovación está presente también en nuestro día a día, desde como trabajamos con los equipos, hasta la manera que tenemos en comunicarnos con el público objetivo. El cliente es el centro de nuestra estrategia, y tenemos que innovar para poder satisfacer sus necesidades.
Ustedes trabajan con el ITACYL en cuestiones de investigación. Descríbanos brevemente los proyectos que llevan a cabo.
Colaboramos estrechamente con ITACYL en proyectos de mejora varietal (por ejemplo, en los ensayos de variedades resistentes a enfermedades fúngicas de la vid), adaptación al cambio climático (nueva generación de portainjertos de viña) y validación de modelos de cultivo en seto como en el almendro. La colaboración con entidades y centros de investigación es clave para la formación, divulgación y desarrollo del sector.
AGROMILLORA se dedica a la elaboración de planta. ¿Qué peso tiene la sostenibilidad en su proceso productivo?
La sostenibilidad es un compromiso integral. Nuestras plantas se producen en sistemas altamente controlados, con eficiencia en el uso del agua, y empleo de insumos más sostenibles. Además, el propio modelo de cultivo en seto permite optimizar los recursos en campo y reducir la huella ambiental.
Otra seña de identidad de AGROMILLORA es la calidad. ¿Cómo intentan dotar de calidad en todo el proceso productivo y en el servicio posventa?
La calidad comienza en la selección genética y continúa en cada fase del proceso: en la multiplicación in vitro, en el desarrollo de la planta, en el control sanitario, en la trazabilidad y en el seguimiento del cliente… Contamos con protocolos certificados y un equipo técnico que acompaña al agricultor antes, durante y después de la plantación. En Agromillora creemos firmemente en la formación y divulgación de la calidad y la innovación en el sector y es por eso que a través de la plataforma OLINT, desarrollamos cursos formativos, técnicos, revista técnica… La calidad pasa por la innovación y la formación.
El equipo humano que configura AGROMILLORA representa el mayor activo de la empresa. ¿Qué nos puede decir de las personas que le acompañan en este proyecto empresarial?
AGROMILLORA es una empresa global, pero con los mismos valores del primer día: honestidad, servicio, de trabajo en equipo, compromiso con el sector… Contamos con profesionales apasionados por la agricultura, con una gran preparación técnica y una vocación de servicio al cliente. Nuestra fortaleza está en la combinación del conocimiento global del sector, la cercanía al campo y el compromiso con el éxito del agricultor.
¿Cuáles son los principales cultivos que manejan a nivel mundial?
Trabajamos con olivo, almendro, viña, frutales de hueso, formatos para viveristas (portainjertos), berries… Cada zona tiene su especialización, pero el almendro en seto y el olivar en seto son modelos revolucionarios que han transformado el sector en distintas regiones del mundo.
¿Qué aportan los años de experiencia en la actividad empresarial de AGROMILLORA?
Nos aportan solidez, credibilidad y una profunda comprensión del sector. Hemos aprendido a adaptarnos a distintos mercados, a liderar procesos de transformación agronómica y a entender las necesidades del sector. Esta experiencia nos permite ofrecer soluciones probadas, pero con una mentalidad abierta al cambio constante.
Desde su responsabilidad en esta empresa, ¿qué nos puede decir de la importancia de la internacionalización en AGROMILLORA?
La internacionalización ha sido clave en nuestro crecimiento. Estamos presentes en más de 25 países con centros de producción propios y una red global de colaboradores en todo el mundo. Esta proyección nos permite intercambiar conocimiento, adaptar soluciones a diferentes condiciones y enriquecer nuestra propuesta con una visión global del campo.
¿Cómo puede afectar el cambio climático a la viticultura mundial? ¿Y a la española?
El cambio climático ya está afectando: adelanto de cosechas, estrés hídrico, nuevas plagas, normativa más exigente en el uso de productos fitosanitarios… En viticultura, implica revisar zonas de cultivo, adoptar nuevas prácticas agronómicas más respetuosas con el medio ambiente y sobre todo, nosotros apostamos para trabajar con la mejora genética como clave para el futuro del sector. En España, además, se suma la necesidad de adaptar el viñedo a nuevas condiciones de mercado, lo que exige más innovación y conocimiento de lo que quiere el consumidor.
¿Qué le diría a un agricultor que esté pensando en plantar viña, almendro, olivo… para que confíe en el producto de AGROMILLORA?
Le diría que no vendemos plantas, vendemos soluciones e innovación. Cada planta que sale de nuestros viveros es el resultado de décadas de experiencia, investigación y compromiso. Nuestro equipo no solo le proporciona material vegetal de máxima calidad, sino un acompañamiento técnico y un modelo de cultivo que marca la diferencia desde el diseño hasta la entrada en producción.
