ADAMA ofrece una conferencia, de la mano de Fitoduero, para orientar al agricultor en la lucha contra enfermedades y plagas
El Hotel Sercotel de Valladolid acogió un acto organizado por Fitoduero para presentar diversas estrategias para el manejo de malas hierbas y resistencias en cereal. Rubén del Val, Regional Manager ADAMA Agriculture, fue el encargado de ofrecer una conferencia sobre este tema cada vez más importante en nuestras explotaciones. Por su interés a continuación ofrecemos un resumen de su intervención:
Estamos a punto de comenzar la siembra del cultivo más importante de la región y de la provincia de Valladolid. Los cereales, cebada, trigo, centeno, etc. Se trata del momento más importante en cuanto a la gestión y decisiones que el agricultor puede y debe realizar. La elección de la semilla, el fertilizante, gestión de la siembra, rotación de cultivo, gestión fitosanitaria. Hay otros aspectos que por desgracia el agricultor no tiene tanta posibilidad o ninguna de influir, como climatología, precios, políticas agrarias, etc.
Dentro del apartado de gestión fitosanitaria, y más concretamente en la gestión de las malas hierbas en los cereales, hay un aspecto que cada vez preocupa más a técnicos y agricultores. Se trata de las resistencias y su manejo. No hay que asustarse, ni entrar en pánico, ya que la mayoría de las veces, las malas eficacias que observamos en el campo no se producen por resistencias, sino por otros factores que influyen negativamente en el momento de la aplicación. La más importante suelen ser los factores climáticos (temperaturas, humedades relativas, amplitudes térmicas, cero vegetativo, etc..) que inciden en la absorción de los fitosanitarios y en la traslocación de los mismos, factores clave para un control óptimo de las malas hierbas por parte de los herbicidas.
Hay otros factores también como son los fisiológicos, barreras naturales que crean las malas hierbas para protegerse de situaciones climáticas adversas y que también son barreras para los herbicidas, por ejemplo, las “ceras con las que se protegen malas hierbas como el Vallico”.
Y por supuesto, las mutaciones que generan las plantas, insectos y enfermedades, gracias a la cuales pueden producirse las tan temidas resistencias. Una resistencia es “La capacidad de una plaga para sobrevivir y reproducirse después de la exposición a una dosis de un herbicida, insecticida o fungicida que es letal para el tipo salvaje y que sea heredable”.
Las resistencias en general suelen aparecer por una falta de diversificación en aspectos tan importantes como la rotación de cultivos, en la gestión de practicas culturales y un manejo de los fitosanitarios correcto. El manejo de estos tres pilares es fundamental y ninguno es más importante que el otro.
Si ponemos el foco en el manejo de los fitosanitarios, nos damos cuenta de que una de las causas puede producir la aparición de resistencias, incluso fenómenos previos como pueden ser las “tolerancias”, es la falta de diversificación de familias químicas para afrontar el control de hierbas cada vez más complicadas, como el Vallico o la Amapola, tanto en el cultivo del cereal como en la rotación. Esto es debido a que, aunque pensemos que hay muchas materias activas en el mercado, las familias químicas por el contrario cada vez menos, debido a la regulación que está sufriendo el sector desde hace años. Los productos fitosanitarios y en este caso los herbicidas de cereal son cada vez menos y hay que usarlos bien.
En general, los tratamientos de Pre-emergencia tanto en el cereal como en la rotación ofrecen un abanico mayor de posibilidades en cuanto al número de familias químicas disponibles para el control de malas hierbas como el Vallico y Amapola. Por el contrario, los tratamientos de post-emergencia tienen muy pocas herramientas una vez declaradas la resistencia, debido a que la diversidad de familias en este tipo de productos se reduce prácticamente a 2 tipos, las ACCASA y a los ALS. Es por lo que desde ADAMA, recomendamos siempre que las condiciones climáticas nos lo permitan, alternar tanto familias químicas, como momentos de aplicación. Además, en el caso de los tratamientos de pre-emergencia, nos permiten controlar las malas hierbas desde la nascencia de las mismas, evitando la competencia con el cultivo desde el principio por el agua, los nutrientes, la luz, etc…
ADAMA ofrece para el control en pre-emergencia y post-precoz de malas hierbas como el Vallico y hoja ancha, incluso las resistentes el mejor catálogo del mercado con productos como el BASTOS, TRINITY, LEGACY, ORDAGO, DADORA Y ALISTER. En el caso del control de estas malas hierbas sea en post-emergencia, ADAMA cuenta en su portfolio con TIMELINE TRIO al que en breve se unirá al catálogo el tan esperado producto llamado “KAMPAI” Doble eficacia, para el control de gramíneas y hoja ancha en el cultivo del cereal.
Autor: Rubén del Val. Regional Manager ADAMA Agriculture S.A.
